“Estoy muy feliz de estar aquí. Es un momento único en mi vida”, afirmó Neymar, convertido no solo en nueva estrella del club francés París Saint Germain, sino ahora también en nuevo "embajador" de la causa humanitaria por la que la ONG recibió el Premio Nobel de la Paz en 1997.
En la sede europea de la ONU, que acogió la conferencia de prensa para anunciar esta colaboración, el deportista aseguró que los problemas sociales forman parte de sus preocupaciones, como lo muestra el trabajo del Instituto Neymar, localizado en el barrio donde él y su familia vivieron durante muchos años.
Neymar recordó que él mismo pasó una infancia de estrecheces económicas, pero "feliz" y que este es el sentimiento que desea transmitir a los niños.
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