El París Saint-Germain (PSG) solo podrá reclutar de cara a la próxima temporada una estrella de un precio máximo de 60 millones de euros, como parte de las sanciones que la UEFA le impondrá por no haber cumplido las reglas del "juego limpio financiero" y que adelante hoy el diario deportivo "L'Équipe".
Como parte de esa condición, el club parisino tendrá primero que vender a uno de sus jugadores en plantilla y no podrá repartir esos 60 millones de euros en varios fichajes. Es decir, tendrá que gastar esa cantidad en un solo jugador y no en dos de 30 millones o tres de 20.
Como añadido, de cara a la Liga de Campeones, el club solo podrá inscribir a 21 jugadores, frente a los 25 que tienen permitidos sus rivales europeos. Y de esos 21 futbolistas, hasta 8 deberán "haberse formado localmente", agrega "L'Équipe".
El PSG no ha conseguido convencer con sus argumentos a la UEFA, que estima que el contrato del club que dirige Laurent Blanc con la Autoridad de Turismo de Catar por valor de 200 millones de euros no se ajusta al valor de mercado y tendrá que reducirlo a 100 millones.
Ese organismo considera que esa circunstancia responde a que el PSG y su principal patrocinador comparten el mismo accionista matriz, a saber, el Estado de Catar.
Además, el PSG será sancionado con una multa de 60 millones de euros, a pagar en 3 años, y deberá reducir su déficit a 30 millones de euros al final de la temporada 2014/2015, lo que supone un tercio respecto al actual.
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